"a los 19 años y trabajando como periodista, Eduardo entró en contacto directo con una delegación norcoreana que visitaba Chile. Fueron esos encuentros transcontinentales los que le permitieron recibir una beca para estudiar una carrera universitaria en Corea del Norte. Este libro da cuenta del entusiasmo que sintió el autor al embarcarse a una aventura, del inevitable choque cultural, así como de las alegrías y privilegios que disfrutó durante los primeros años de su estadía en Corea del Norte. Sin embargo, como anticipa el título de este libro, su suerte cambió un fatídico 27 de septiembre de 1967, cuando fue detenido y posteriormente encarcelado. Vivió ocho largos meses de horrores en condiciones miserables"
