La autobiografía intelectual del Premio Nobel de Literatura Mario Vargas Llosa es una obra que busca contribuir al desarrollo de la cultura democrática y a alejar a la sociedad de la "llamada de la tribu". En este libro, el autor no se centra en sus vivencias personales, sino en las lecturas que han moldeado su forma de pensar a lo largo de los últimos 50 años.
Vargas Llosa ofrece una cartografía de los pensadores liberales que le han ayudado a la creación de un nuevo corpus de ideas, tras el desencanto con la Revolución Cubana y el distanciamiento de las ideas de Jean-Paul Sartre. Entre los pensadores destacados se encuentran Adam Smith, José Ortega y Gasset, Friedrich Hayek, Karl Popper, Raymond Aron, Isaiah Berlin y Jean-François Revel, quienes han influenciado profundamente su forma de pensar y su visión del mundo.
El libro ha recibido excelentes críticas por parte de expertos, destacando su tratamiento original y la valiosa contribución al debate político actual. Se describe como un ensayo que se lee como una novela y proporciona una interesante hoja de ruta de lecturas para aquellos alejados del liberalismo.
Se trata de una obra fundamental para quienes buscan comprender las bases del pensamiento liberal y su importancia en la cultura democrática. Con la prosa característica de Vargas Llosa, este libro ofrece una reflexión profunda sobre la importancia del individuo frente a la tribu, la nación, la clase o el partido, y defiende la libertad de expresión como un valor fundamental para la democracia.