Con la publicación de este libro, que fue galardonado con el premio Somerset Maugham, Ian McEwan se convirtió en la revelación literaria inglesa de finales de los años setenta. Posteriormente, confirmó de sobra las esperanzas suscitadas.
En los ocho relatos de Primer amor, últimos ritos, la depravación puede enmascararse de inocencia y las mariposas pueden resultar siniestras. Con igual fuerza es capaz el autor de mostrar cómo la vida de un niño es arrasada por lo macabro y de destilar las sensaciones del primer amor, rastreando sus rituales iniciáticos, infundiendoles una lujuriante imaginería sensual. Asociando lo insólito y la provocación, la ternura y un humor glacial, Ian McEwan nos revela la cara oculta de nuestros fantasmas y nos ofrece una visión diferente de nuestra vida cotidiana.